El tiempo y la frecuencia con la que harás terapia vendrá determinado por tu propio proceso y tus necesidades terapéuticas, y las determinará la persona que te atienda (teniendo en cuenta tus necesidades, por supuesto).

Nuestra recomendación habitual es comenzar con una frecuencia semanal e ir espaciando las sesiones según avanzas en tu proceso.

El objetivo de nuestra primera llamada es, además de explicarte cómo trabajamos y resolver tus dudas, conocerte y saber qué te trae a terapia.

De esta manera, podremos asignarte a la persona del equipo que mejor se adapte a tus necesidades, ya que cada una está especializada en diferentes ámbitos (aunque todas son unas cracks, y tienen enfoque y valores comunes).

Por supuesto, si quisieras con alguien concreto, puedes decírnoslo y lo tendremos en cuenta.

Además, si por cualquier motivo no lograses conectar y crear ese vínculo tan necesario en la terapia, solo tendrías que decirlo y no habría ningún problema en cambiar de profesional.

Sí, siempre que haya sido con 24h de antelación.

De no ser así, la modificación no será posible, y, dado que los pagos se harían de forma previa a la sesión, no habría posibilidad de reembolso.

Lo que nos cuentes en consulta será totalmente privado y confidencial.

Es más, como profesionales de la psicología, nuestro código deontológico nos obliga a ello.

Nosotras hemos realizado terapia de las dos maneras y, en nuestra experiencia, la terapia online es igual de efectiva.

Hemos visto cómo el vínculo terapéutico se forja igual, y nuestros pacientes han mejorado su bienestar de la misma manera.

Además de obtener los mismos resultados, permite ahorrar tiempo y adaptar mejor los horarios al hacerla desde casa, lo que también favorece el compromiso, la adherencia y, por tanto, la efectividad de la terapia.

Las consultas se hacen a través de videollamada, mediante un servicio que NO requiera que crees ninguna cuenta como Google Meet o Zoom.

Antes de la primera sesión, la profesional que te hayamos asignado se pondrá en contacto contigo mediante el teléfono o email que nos hayas proporcionado para darte los detalles de cómo os conectaréis.

Sí.

Aunque tu psicóloga pueda sugerirte abrir nuevos caminos, solo se trabajará sobre aquello que tú quieras.

Además, cada sesión individual está diseñada para adaptarse específicamente a tus necesidades y objetivos personales. Trabajaremos juntos de manera individualizada para abordar tus desafíos y promover tu bienestar emocional.

Esto es algo muy habitual, pero no tienes por qué preocuparte.

Parte de nuestro trabajo es saber hacerte las preguntas adecuadas y saber buscar en tus dificultades y tu historia para averiguar qué te está causando malestar o qué hay por debajo para hacerte sentir de así.

No podemos prometerte que funcionará.

La terapia es algo muy complejo, y depende de muchos factores: de nosotras como profesionales, de tu contexto personal, de la adherencia que desarrolles al tratamiento, de la conexión que crees con tu terapeuta…

Afirmar que funcionará sería irresponsable por nuestra parte, porque no lo sabemos, porque cada persona es un mundo.

Lo que sí podemos decir es que empezar terapia psicológica puede ser el primer paso de un nuevo camino.

Tu camino.

Nuestra labor será darte la mano y las herramientas que necesitas para que puedas recorrerlo.

Intentaremos hacerte ver que la vida no se trata de eliminar todas las dificultades, sino de entender su origen, por qué te acompañan, darles otro significado para poder sanar e incluso, a veces, aprender a saber vivir con ellas.

Eso es para nosotras tener una Mente Heroica.

Si crees que tu camino para dejar atrás el malestar y potenciar lo que te hace sentir bien pasa por ahí, entonces venir a terapia sin duda puede ser una gran idea.

Te invitamos a escribirnos y, luego, entramos nosotras.